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Vivero de poemas de toda una vida y de las de aquellos que pasaron cerca. Libre de prosa desde el 2012. Antiguamente, Poesías de una Noche de Verano

martes, 8 de agosto de 2023

El perro del hortelano de mis entrañas

Estoy furioso contigo y no por todos los golpes bajos,
sino por tumbar mis altas expectativas
de que mi vida por fin sería
casi como siempre la había imaginado.
Quise que todo fuera de una manera, que nada cambiara
y sin embargo, todo cambió.

Estoy dolido del tormento de estos meses,
pero más aún de que me saques tanto de quicio,
de que me respetes tan poco y nunca consideres
que me pones siempre al borde del precipicio.
Estoy rabioso de contenerme en el golpe final,
apelando a todos los momentos juntos,
para que seas tú quien termine por atacar.

Estoy furioso de que no veas la bondad de mis actos
ni el defecto en los tuyos propios.
Me agota tu caótico dolor, con el que nos irradias,
con el que viertes falsos testimonios,
con el que acosas, acusas, maltratas, te maltratas
y con el que estás dispuesto a perder el juicio
o ir a uno por cada corazón en el que te hiciste un sitio.

Estoy furioso de ser un libro abierto para ti
y que siempre me generes tanta ira.
Pero estoy preocupado, pues te veo caminando
por sendas oscuras donde la luz parece no llegar.
Intento ayudarte, pero no te puedo salvar.
Intento entenderte, pero no soy capaz.
Intento apartarte, pero no me dejas en paz,
intento aconsejarte, pero no quieres escuchar.
Eres el perro del hortelano de mis entrañas,
la gata Flora jugueteando entre mis costillas.
Y yo no hablo con animales, pero no se me escapa
que se te deben hacer muy largos los días
ahora que tú tampoco con ellos hablas.

No te pido más disculpas, pues ya lo hice más que tú.
No quiero que te disculpes, tan solo que halles la luz
que te traiga de nuevo a una senda mejor.
Pon el nombre que quieras a lo que somos,
pero olvida que te tienda más la mano,
porque no quiero que me tires contigo al foso
como tantas veces ya has intentado.
Ojalá los tiempos cambien y todo sea tranquilo
y todos los versos ponzoñosos que te he escrito
sean solo un mal sueño que se hizo demasiado largo.

miércoles, 2 de agosto de 2023

Indómito

Limpiando mi habitación,
recuerdos desordenados junto a ella aparecen.
Los guardo con los demás, sabiendo
que al ordenarlos los desordeno,
al menos cronológicamente.
Pero no tiene importancia,
pues nada persiste, ni siquiera
si lo guardas en fundas plastificadas.

Nos aferramos a la vida
por los recuerdos que vamos creando
sin saber que a veces son ancla
y que a cada avance más arrastran,
pues más vamos cargando. 
Pero no tiene importancia,
nada persiste, ni siquiera
en las memorias que dicen no olvidar nada.

Nos aferramos a besos
cuyo carmín hace mucho limpiamos,
a días de gloria cuyo aliento
obra ahora en favor al tormento
y no a la felicidad.
Nos aferramos a la creencia
de que nunca jamás moriremos
o que, al menos, jamás seremos olvidados
sabiendo, aún sin quererlo que estamos
condenados a la nada.
Pero no tiene importancia,
porque esta no es razón alguna
para darlo todo cada mañana.

Hay algo más grande
que las guerras y la miseria en este mundo:
La bondad resiliente, las risas inocentes,
los ojos en el futuro y el deseo consciente
de hacerlo mejor que en el pasado.
Puede que no importe,
pero no es excusa para rendirse
ni para ceder ante los golpes. 

Hay algo indómito en los corazones:
gritos de todos los que nos precedieron,
una chispa dentro de nuestros puños
que nos alumbra en momentos oscuros
y nos hace avanzar.
Hagamos que siempre importe
y que sea lo único que quepa
en todos nuestros corazones.

Todos buscan contar su historia
en sueños grandes de fama y riqueza.
Pero no olvidéis que el mayor tesoro
es el de querernos los unos a los otros
y que ya estáis en marcha
escribiendo vuestra importancia
en corazones indómitos como el vuestro,
resistiendo en cada inédita mañana.